El III CONGRESO INTERNACIONAL ARTE Y ENTORNO. Latitud Norte: ética y estética del habitar, pretende ser un foro para la reflexión y el debate de cómo en determinados entornos de Suecia, Islandia, Dinamarca, Finlandia o Noruega puede abordarse tareas que, en buena medida, son también nuestros retos de futuro. En el fondo, se trata de apostar por sociedades más comprometidas desde un punto de vista de los valores y de la solidaridad, y más productivas en cuanto a las ideas y la generación de recursos.

La obra de arte en tanto que objeto privilegiado de la expresión artística no es el único canal de las manifestaciones de arte. Lo artístico como expresión de lo cultural abarca múltiples ámbitos de la actividad humana. Como sabemos el paisaje, la arquitectura el diseño, la moda, etc. son, en mayor o menor medida expresión de una identidad cultural. Entendemos que una sociedad se proyecta hacia el futuro de acuerdo con una tradición y en decidida confrontación con las nuevas realidades que valoran al ciudadano, el paisaje, la sostenibilidad, la ecología, el medio ambiente, el transporte público, etc.

Es por ello por lo que este congreso focaliza su atención en determinados entornos del consejo nórdico (Suecia, Dinamarca, Finlandia, Noruega, o Islandia). Las capitales de estos países se encuentran en los primeros lugares en cuanto a sostenibilidad y cultura medioambiental; son ejemplo de sociedades comprometidas con los valores que se supone que deben hacer frente a los retos que nos depara el futuro y que por lo tanto nos pueden aportar líneas de actuación ya desarrolladas de planificación urbana, diseños de ciudad y aportaciones artísticas comprometidas con el entorno. Por qué las ciudades del norte de Europa destacan en este tipo de indicadores es una pregunta que va más allá de los proyectos o iniciativas concretas que las administraciones respectivas hayan podido llevar a cabo. La respuesta se halla en la cultura de estas sociedades, en una diferente manera de entender la relación del hombre con su entorno. Los elementos, las estructuras y la lógica de funcionamiento del capitalismo global nos sirven para entender la evolución de las ciudades. Uno de los aspectos cruciales de esta evolución es la insostenibilidad de las ciudades en términos ecológicos. El desarrollo que algunos entienden como el motor de riqueza y que organiza nuestras sociedades, y la destrucción del medioambiente son el resultado de una misma dinámica. Y sin embargo, esta evolución muestra significantes desigualdades entre unas ciudades y otras. Es en aquellas que marcan la diferencia de manera positiva en la que nos debemos de fijar a la hora de proyectar nuestra ciudad hacia el futuro, entender su evolución y aprender de su cultura. Las ciudades del norte de Europa son líderes en el contexto europeo en cuanto a sostenibilidad e impacto medioambiental: El enfoque hacia esta área geográfica no es otro que el de crear un marco de reflexión con lo que son ejemplos de ciudades preocupadas y con una notable sensibilidad por la sostenibilidad, el desarrollo urbano, el uso y planificación del transporte público, la utilización de la energía, la ecología, la accesibilidad, etc. Estos países se han destacado por planificar, diseñar y construir espacios públicos que puedan servir como un lugar para todos.

Desde el Centro de Investigación Arte y Entorno también existe una preocupación por la relevancia que hoy ha adquirido el debate sobre la ciudad, el entorno urbano y las relaciones generadas en el mismo. En un momento en el que más de la mitad de la población mundial es urbana se requiere una especial atención sobre la importancia del espacio público. Estudiar su diversidad, los nuevos modelos, así como los aspectos negativos que pueden devenir, constituyen la base para desarrollar nuevas políticas urbanas que faciliten la inclusión de los diferentes colectivos en el espacio público favoreciendo la cohesión social y cultural. Los problemas de sostenibilidad que habitualmente se vinculan al crecimiento económico y ecológico también ejercen una especial influencia en el urbanismo y en la estética de las ciudades contemporáneas.

En los últimos años se ha comenzado a aplicar este concepto a parcelas concretas de ámbito urbano: transportes, calidad medioambiental, disponibilidad y accesibilidad de servicios, etc. Esta circunstancia ha suscitado el interés por todos aquellos discursos en los que la relación entre el arte y el entorno deja entrever una preocupación socioestética en la que, junto a los tradicionales factores económicos, convergen elementos tan diversos como el marketing cultural, el turismo, o las nuevas tecnologías aplicadas al diseño de territorios, movilidad, transporte público, diseños alternativos a la trama urbana, sociología urbana relacionada a la democracia participativa, habitabilidad, sostenibilidad ambiental, sostenibilidad urbana, sostenibilidad social, desarrollo sostenible, habitabilidad, diseño urbano ambiental, diseño urbano del paisaje, etc. Podríamos afirmar que la transformación y la reproducción de la naturaleza se materializan en el paisaje cotidiano de la ciudad. El paisaje urbano representa una idea de la ciudad como lo es la producción del espacio urbano. Es en sí mismo una idea de la ciudad, una imagen visual de lo que la ciudad representa, y como tal, el paisaje urbano es productor de significados. En este sentido la urbe ocupa un lugar exclusivo y privilegiado en nuestra experiencia cultural. Como artefacto cultural y estético, el paisaje urbano se puede considerar como la visión que una sociedad lanza sobre sí misma en el futuro.

En los congresos anteriores la ciudad ha sido el foco de atención; la ciudad como creación de espacio social y espacio humano que requiere de un equilibrio entre lo emocional, lo natural y lo propiamente humano, por lo que creemos que el ámbito de lo artístico, desde lo multidisciplinar, tiene mucho que aportar.

Este III Congreso considera las fuerzas que han dado forma al paisaje urbano, cómo ha evolucionado en ciudades destacadas por su sensibilidad ecológica, urbana, etc. Consideramos que las ideas de arquitectos, planificadores urbanos, diseñadores, las necesidades de capital, las coacciones del entorno, y las acciones de temas urbanos estructurados de forma diferente chocan para formar el espacio urbano. Para esto es vital aprender a leer el espacio urbano en el contexto de relaciones sociales y economías políticas.