El consumo excesivo de alcohol altera el balance funcional en el cerebro; desconecta las regiones corticales mientras aumenta su acoplamiento con regiones subcorticales como el estriado, importantes para la motivación, recompensa y el establecimiento de hábitos de conducta. Estas son las principales conclusiones de un estudio desarrollado por investigadores de la Universitat Politècnica de València en colaboración con el Instituto de Neurociencias de Alicante (UMH-CSIC).
5:53 · 2014