El Real Club Marítimo de Melilla acogió entre el 18 y el 20 de abril el Campeonato de España de Snipe, una cita que congregó a 104 embarcaciones, marcando un hito de participación con regatistas de 11 comunidades autónomas y seis países invitados.
Las condiciones de viento fueron exigentes y pusieron a prueba tanto a la flota como a la organización. Durante las jornadas del viernes y sábado se completaron cuatro pruebas, en su mayoría navegadas con vientos de entre 16 y 22 nudos, con rachas que superaron los 25 nudos en algunos momentos, especialmente en la segunda jornada. Estas condiciones rozaron —y en algunos casos excedieron— los límites recomendados por la clase Snipe para regatas, los cuales establecen un máximo de 23 nudos sostenidos para iniciar una prueba. A pesar del esfuerzo del Comité, el domingo no se pudo navegar debido a vientos persistentes de más de 30 nudos.
Estas condiciones dieron lugar a numerosas roturas, abandonos y desarboladuras, dejando claro por qué el Snipe es una clase que requiere tanto habilidad como conocimiento táctico, especialmente en escenarios de viento fuerte.

