La cantidad de tiempo que nos hacen perder las reuniones improductivas, mal preparadas y planificadas, exige de un esfuerzo por parte de todos por mejorar la calidad de las mismas. Aprendiendo a dirigir y a participar en reuniones, verás optimizado tu tiempo de intervención y asistencia a las mismas. Contagia estas enseñanzas a otras reuniones de tu ámbito privado (reunión de vecinos, de asociaciones, etc) y verás como todos te lo agradecerán.