
Fue pionera en 2003: el primer espacio pensado, creado y gestionado por y para el estudiantado en una universidad española. Hace 20 años, bajo el mandato del entonces rector Justo Nieto, abría sus puertas la Casa del Alumno de la Universitat Politècnica de València, un proyecto que, 20 años después, sigue siendo un referente a nivel nacional.
Y estas dos décadas de historia se celebraron conforme correspondía. La jornada comenzó con un sencillo pero emotivo acto institucional en el que tomaron la palabra el propio Justo Nieto, recordando el proceso de construcción del edificio, y la actual delegada de estudiantado, Rayan Faiz, que puso en valor la importancia de la casa y la labor del equipo que la gestiona.
Tras soplar las velas y firmar en el libro de honor, se disparó una mascletá que encendió Nieto, para dar paso después al reparto de paella para las personas asistentes y continuar con música en directo de diversos grupos de la UPV. Ya por la tarde se repartió chocolate y coca de llanda.
Esta ha sido la culminación a las actividades de celebración de este vigésimo aniversario, que incluyeron la plantación de un Quercus, un árbol conmemorativo en la fachada sur del edificio, y el descubrimiento de una placa recordatorio de esta efeméride.
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