La Cátedra Aguas de València ha concedido una nueva beca de prácticas en empresa UPV, al estudiante Adrián Martínez Biosca, con el objetivo de que desarrolle el proyecto titulado: “Puesta en marcha de una planta piloto de humedal artificial de flujo subsuperficial empleando fango de potabilizadora como medio filtrante reactivo para mejorar la calidad del efluente de una EDAR.”

La investigación, propuesta por la entidad Global Omnium y la Universidad Politécnica de Valencia, busca conocer cómo el empleo de fangos puede ayudar a “reducir las concentraciones de nutrientes y de otros contaminantes orgánicos (como determinados contaminantes emergentes) presentes en el efluente del tratamiento secundario, en humedales artificiales de flujo subsuperficial (HAFSS)”.

Para ello, Adrián evaluará los fangos procedentes de la ETAP La Presa en Manises, -como sustrato de dos plantas piloto de tamaño GRG (1m³) ubicados en la EDAR de Quart Benàger-, donde observará si el proceso de tratamiento mejora la calidad del agua, contribuyendo así a reducir el impacto sobre el medio receptor.

La ayuda, que tendrá una duración de seis meses, permitirá que el alumno adquiera conocimientos sobre la puesta en marcha y seguimiento de proyectos de investigación a escala industrial, el funcionamiento y las tareas de mantenimiento de los HAFSS o la realización de analíticas de control del proceso, entre otras funciones.  

Para Abel Solera, director de la Cátedra Aguas de València, este caso es un buen ejemplo de que la Cátedra cumple con su objetivo principal de "fomentar la sinergia entre universidad y empresa y mejorar la formación académica y especialización de sus titulados”, señala Abel Solera.

El estudio será supervisado por los profesores Miguel Martín Monerris y Carmen Hernández-Crespo, y contará con el apoyo de los técnicos de Global Omnium, Tatiana Montoya Martínez (actualmente Responsable del grupo de I+D+i del Área de Residuales) y Nuria Oliver Rajadel (técnico I+D+i del Área de Residuales).