Tres premios Nobel de Física -Sheldon Lee Glashow (1979), Jerome Friedman (1990) y Franck Wilczek (2004)- compartieron ayer martes por la tarde una histórica charla abierta con el público de la Universitat Politècnica de València (UPV), que llenó por completo el salón de actos el cubo azul de su Ciudad Politécnica de la Innovación.
"Seréis vosotros, la próxima generación, quien encuentre las respuestas", afirmó Frank Wilczek, ganador del Nobel gracias a su descubrimiento de la libertad asintótica (fenómeno que explica el comportamiento de los quarks, cuya fuerza de atracción entre ellos aumenta a medida que se les intenta separar), plasmado en su trabajo final de grado en Princeton cuando apenas contaba con 21 años.
"Si tenéis algo, si estáis convencidos, id a por ello"
El encuentro, plagado de mensajes positivos hacia los jóvenes estudiantes e investigadores, dejó múltiples consejos de quienes han alcanzado la cima del reconocimiento científico internacional.
"Si tenéis algo, si estáis convencidos, id a por ello. Sin dudarlo", señaló Walter Friedman, descubridor de los quarks. "De todos modos", completó Sheldon Lee Glashow (ganador del Nobel por su teoría electrodébil que unifica la dos de las cuatro fuerzas fundamentales de la naturaleza, la interacción débil y el electromagnetismo), "sed conscientes de que en algún momentos cometeréis un error. Todos lo hemos hecho. Galileo, Newton. Vosotros también os equivocaréis. Es parte del proceso de éxito".
"La última persona que hizo un gran descubrimiento solo quería comprobar algunos fenómenos, ése es el espíritu"
En cuanto a metodología de investigación, Wilczek explicó que "la última persona que hizo un descubrimiento genial no pretendía en absoluto revolucionar la Física. Simplemente, quería comprobar algunos fenómenos. Creo que ese es el espíritu".
Además, el científico neoyorquino recomendó, fervientemente, es estudio de las matemáticas: "Si os queréis dedicar a la carrera investigadora en el campo de la Física, aprended matemáticas. Tantas como podáis. Es un instrumento fundamental, una herramienta imprescindible".
"A lo mejor, ustedes no saben lo bueno que es su país"
La charla, que siguió con enorme expectación el público presente -entre los que se encontraban Francisco Mora, rector de la UPV; José Capilla, vicerrector de Investigación, Innovación y Transferencia UPV; José Mª Benlloch, director del I3M (UPV-CSIC-CIEMAT); o Josef Prusa, actual gurú de la cultura maker que hoy imparte en la UPV su primera charla en España- dejó varias frases de impacto que sorprendieron a los asistentes.
Entre ellas, la siguiente de Glashow: "Imaginen que quiero hacer un semestre de Física en Europa, ¿Adónde iría?, ¿A Copenhague? Mmmmm, no gracias. ¿A París? ¿Londres? No, no. No me malinterpreten, son sitios estupendos. ¿Cambridge?, ¿Oxford? Tampoco. Si tuviera que escoger un lugar, elegiría Madrid o Valencia. A lo mejor, ustedes no saben lo bueno que es su país".
"A medida que avanzaba, las cosas se volvían más sencillas, no más complicadas, y eso, en Física, son buenas noticias"
Los tres genios, que mostraron una cercanía que el público agradeció ("Confieso que, en ese tema, soy un ignorante total", afirmó Glashow para sonrisa general al ser cuestionado sobre gravedad y mecánica de quarks), hablaron también de sus experiencias personales y de los logros que les llevaron a ganar el Nobel.
"A medida que avanzaba, las cosas se volvían más sencillas, no más complicadas, y eso, en Física, son buenas noticias", indicó Wilczek. Friedman, por su parte, contó que "en los años 70, decidimos iniciar una nueva serie de experimentos, a ver qué podíamos obtener. Y cuando empezamos a obtener resultados, estábamos tan emocionados que no nos preocupábamos en publicar".
"Es una sensación única ver lo que nadie antes ha visto y entender lo que nadie antes supo explicar"
Cuestionados sobre si sintieron mayor emoción al realizar el descubrimiento o al recibir el premio, hubo opiniones para todos los gustos. Friedman eligió, sin dudar un instante, "el momento del laboratorio", ya que "es una sensación única ver lo que nadie antes ha visto y entender lo que nadie antes supo explicar".
"Permítanme que discrepe", afirmó Glashow. "En mi caso, el jurado del Nobel me informó de que el premio se debía, no a una trayectoria brillante, sino a una única publicación, un 'paper' escrito diez años antes y que tanto para mí como para la comunidad científica, había pasado sin pena ni gloria. Por eso, para mí, el clímax llegó cuando me concedieron el Nobel".
Así, de la mano de múltiples anécdotas, recomendaciones y experiencias, Friedman, Wilczek y Glashow concitaron durante varias horas la atención de un público entregado, que agradeció enormemente poder disfrutar en la UPV de la presencia, al mismo tiempo, de tres grandes personalidades de la ciencia a nivel mundial.
Noticias destacadas