A principios de año, la UPV lanzó una campaña para recoger tapones de plástico. El objetivo era recaudar fondos para las 350.000 personas que en la Comunitat Valenciana sufren alguna de las llamadas enfermedades raras.
A lo largo del curso se fueron instalando contenedores específicos en todas las escuelas y facultades y el 29 de julio se celebró en l'Escola d'Estiu el día del tapón solidario. Gracias a todo ello, la UPV ha conseguido recoger, en esta primera fase, un total de 4 toneladas de tapones de plástico (el peso equivalente a 4 automóviles convencionales) que la empresa valenciana Recytrans retiró recientemente del campus para su reciclaje.
Los fondos obtenidos se destinarán a la Federación de Enfermedades Raras (FEDER), que ayuda a las familias que sufren estas dolencias. Según su presidente, Juan Carrión, las personas con patologías poco frecuentes son uno de los sectores más vulnerables de la sociedad.
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