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Julio Moisés López Sánchez, graduado UPV en Ingeniería Electrónica Industrial y Automática, en primera posición del ranking nacional SEDEA para su titulación, destaca de su paso por la Universitat Politècnica de València las oportunidades para colaborar.

Entre ellas recuerda con cariño su actividad en BEST Valencia, asociación de Generación Espontánea UPV, donde trabajó para potenciar las habilidades del alumnado por medio de eventos: competiciones de ingeniería, talleres y cursos…

Esta inquietud por ayudar también le ha llevado a trabajar con entidades como la Obra Social El Carmen de Zaragoza. “De todas estas experiencias, aunque algunas tienen momentos realmente duros, guardo un grandísimo recuerdo y seguiré participando”, explica.

“Animo a todo el mundo a ayudar en lo que pueda. No hace falta donar miles de euros; las pequeñas aportaciones marcan la diferencia, ya sea pasar la mañana de un sábado en un comedor social o un refugio de animales, o donar 5 euros”, afirma el titulado UPV.

“Me atraía dar vida a las cosas”

Julio Moisés López Sánchez se encuentra en la primera posición del ranking de SEDEA para su carrera; ya había obtenido el Premio al Mejor Expediente Académico UPV en su grado que, sin embargo, no había sido su primera elección.

“Tenía claro que quería hacer una ingeniería, pero no cuál. Finalmente empecé Ingeniería Mecánica, pero me di cuenta de que no era para mí y me cambié a Ingeniería Electrónica Industrial y Automática, porque me atraía mucho el poder "dar vida" a las cosas. Me refiero a conseguir que algo aparentemente inerte, con un pequeño código y unas cuantas conexiones (bien hechas, claro) puede hacer lo que se te ocurra; además, se pueden probar cosas, toquetear y atreverse y eso hace que sea entretenido”.

Durante la carrera obtuvo una Beca de Colaboración del Ministerio de Educación, que le permitió adentrarse en la investigación biomédica en el Centro de Investigación e Innovación en Bioingeniería (Ci2B), de la mano de su profesora Beatriz Trénor. “Un año que recuerdo difícil, ya que coincidió con otras responsabilidades, pero que me sirvió para crecer mucho en lo personal y en lo profesional”, explica.

“Beatriz, además de ser una gran profesora, me permitió aprender muchísimo a diferentes niveles y noté la confianza que depositó en mí; siempre le estaré muy agradecido por esa oportunidad”, afirma.

La universidad, algo más que las clases

Julio anima al alumnado a participar en iniciativas como Generación Espontánea UPV, que permiten desarrollar habilidades que no se adquieren suficientemente en las clases “como organización personal, flexibilidad, escucha activa, trabajo en equipo (que no en grupo), liderazgo, a contactar y negociar con empresas...” También valora la experiencia personal: “Haces grandes amistades y vives momentos de los que guardas un muy bonito recuerdo”.

El titulado UPV señala la importancia del profesorado, entre quienes destaca a la citada Beatriz Trénor y a Salvador Coll Arnau. “En clase, Salvador es un profesor genial y siempre atento a sus estudiantes; fuera está dispuesto a colaborar en los proyectos que emprenden los alumnos. Ha participado en numerosos eventos de BEST Valencia y es el tutor de la asociación desde hace un tiempo. Le deseo mucha suerte como vicerrector de Innovación y Transferencia, sé que lo va a hacer de 10. Docentes como él y Beatriz Trénor son los que consiguen que la universidad sea mucho más que un lugar al que vas a dar clase y a hacer exámenes”, finaliza Julio.

Beatriz Trénor destaca de Julio que “ha sido desde el principio un alumno infinitamente curioso e inquieto, lo cual ha sido fundamental para el alcance de sus logros académicos. Además, su capacidad de adaptación a las distintas disciplinas, así como su independencia en el aprendizaje y su rigor en el trabajo, le van a abrir grandes oportunidades científicas y profesionales”.

Por su parte, Salvador Coll afirma que Julio “es de esos alumnos que no dejan indiferente al profesor por su gran inteligencia, extraordinario interés, capacidad analítica, esfuerzo y cuidado en los detalles. En una pregunta despliega un nivel de comprensión al alcance de muy pocos. Su implicación en las clases y su compromiso con la actividad universitaria más allá de las aulas le honran. Le auguro muchísimos éxitos en todo aquello que emprenda y estoy seguro que en no mucho tiempo estará llevando muy alto por el mundo el pabellón de la UPV”.

Futuro próximo en análisis de datos

Tras finalizar el grado, Julio comenzó el Máster en Ingeniería Biomédica, pero “coincidiendo con la pandemia de COVID-19, cambiaron mis intereses y finalmente estoy acabando el Máster en Ingeniería de Análisis de Datos, Mejora de Procesos y Toma de Decisiones”, explica. En tres semanas comenzará a trabajar en Madrid en la consultora SDG Group como Analista de Datos.

“Voy a poder tener mi primera experiencia laboral real y aprenderé muchísimo. A medio plazo me veo siendo el responsable de un equipo de personas, con un perfil menos técnico y mucho más de gestión”, afirma Julio. “Más allá de lo laboral y conociéndome, estoy seguro de que seguiré buscando y encontrando proyectos de todo tipo (voluntariados, emprender...). Siempre me ha gustado participar en todo tipo de proyectos y no quiero dejar de hacerlo, porque creo que tengo mucho que aportar y que aprender”.

Esta noticia forma parte de la serie Graduados y graduadas top de la UPV, que pretende visibilizar a los estudiantes más sobresalientes del país. Puedes leer más sobre el proyecto y conocer al resto de perfiles brillantes en: La UPV en el ranking SEDEA.

Noticia en UPV TV
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