Estrategia didáctica donde el profesor es el principal protagonista, centrándose en suministrar a los alumnos información esencial y organizada, procedente de diversas fuentes, con unos objetivos específicos, utilizando para ello, además de la exposición oral, otros recursos didácticos que faciliten la comunicación y permitan que los sujetos registren más información y activen más estrategias de aprendizaje. Entre estos recursos cabe destacar los que ofrecen las nuevas tecnologías de la información y, sobre todo, la participación del alumno en las clases con el fin de que la exposición resulte más dinámica.
Se considera que el dominio de la materia por parte del profesor y sus habilidades para la comunicación didáctica permiten captar la atención de los alumnos, despertar su interés por el contenido del tema y activar el procesamiento de la información facilitada.
La universidad ante la nueva cultura educativa. Enseñar y aprender para la autonomía. Editorial Síntesis, Madrid.