3 RUTAS POR LA CALDERONA
(Centro Excursionista de Catalunya)

Salimos del pueblo de Serra (330 m) hacia el oeste, por la calle de la Pobleta, pasada la font de la Mare de Déu dels Angels. La calle sale del pueblo y se prolonga por una carretera que entra a la valleta de la font de la Deula. Seguimos las señales del PRV8, a la font del Poll, por donde pasa el trazado principal del GR10. Hacia un edificio de apartamentos, el "Yolanda", cogemos una pista a la derecha que sube. Es preciso seguirla hasta que, en una revuelta a la derecha y siguiendo la misma dirección, encontraremos una caseta de la conducción de aguas y una senda que se adentra en el barranc de la Deula. La fuente homónima queda a nuestra izquierda, abajo, de donde sale la canalización, aunque, prácticamente y lamentablemente, ha desaparecido a raíz de las obras. Recorreremos el barranco por la senda, nada más cortada por una pista que la cruza, y continuaremos unos cuantos metros adelante hasta alcanzar el collado que cierra la cabecera.

Coll de la Pobleta (599 m), en el extremo sur de Rebalsadors, que da paso a las vertientes SW, En nuestros pies vemos la hoya donde se encuentra la Pobleta y la cartuja de Portaceli, inmensa y bellísima al corazón de la sierra. Continuamos por la senda que faldea toda la vertiente, disfrutando de la grandeza del panorama, hacia un collado que adivinamos al norte, entre Rebalsadors y un montículo con una torre de guarda forestal.

Antiguo coll de la Moreria (645 m), donde encontramos la pista que sube desde la cartuja. Este collado es un paso natural para acceder a la sierra desde el sur. El topónimo, bien bonito y recogido en textos, no consta en ningún soporte cartográfico; antes de su desaparición hemos preferido señalarlo, aunque que sin poder confirmar la localización en este preciso lugar, por testimonios que nos dan el rigor necesario. Hacemos pie en la pista y dejamos el desvío que baja a la font del Verro; seguimos a la derecha, a media altura, y rodeamos la hoya de la Falaguera hasta el collado que vemos al norte. Enfrente tenemos las altas puntas de la Penya-roja y l´Alt del Sapo.

Pasamos por el collado (634 m) donde está la casa forestal de la Falaguera y llegamos a la font del Poll (670 m), al lado de la pista. Antes hemos dejado a la derecha una pista que va hacia Serra por el Coll del Llentiscle. La pista que seguimos, que atraviesa por el norte toda la sierra y que es seguida por el trazado GR10, del que encontraremos las pintadas, lleva al bonito pueblo de Gátova. Nosotros la dejamos aquí para tomar un sendero que, por encima mismo de la fuente, sube en vertical buscando un collado de la carena. Llegados (777 m) a la carena entre l´Alt del Sapo y la Penya-roja, es preciso seguir por el lomo (cortafuegos) hasta conseguir esta cima.

Cumbre de la Penya-roja (829 m), con un antiguo mojón. Su situación la hace de excepcional atalaya, tanto por el norte -con el valle del río Palancia, la sierra de Espadán y Peñagolosa al fondo- como de toda la sierra de Portaceli y las vecinas tierras de la Huerta con el mar de fondo. Sólo en la misma sierra se descubren las próximas Penyes Altes, Peñas Blancas, l´Oronet, el Garbí, el Montmajor y el Gorgo, aislado sobre un fondo donde distinguimos los perfiles más alejados de la Cueva Santa (con el Montemayor), las sierras de Bellida, de Andilla. Para descender seguimos el cortafuegos para apartarnos pronto a la derecha, y al sur, buscando el collado que nos separa de Rebalsadors, pasando por el refugio que del Centro Excursionista de Valencia tiene en este lugar estratégico.

Coll del Llentiscle (707 m), obligado punto de paso y cruce de caminos, donde cogemos el trazado principal del GR10, que ya no abandonaremos durante la excursión. Dejamos las pistas que siguen al oeste y al sur, y cogemos la principal, que baja hacia la próxima fon del Llentiscle, de magníficas aguas y al pie de una sombría de carrascas. Seguimos bajando por la pista al SE, rodeando el vallado ocupado por algunos huertos. Al cabo de poco veremos, en la vertiente NE, un gran edificio entre pinos. Un poco antes de llegar debemos abandonar la pista a la derecha, por un campo de almendros que nos permite tomar una senda que, al cabo de pocos metros, nos dejará en la font de la Prunera.

Font y casa de la Prunera (550 m), importante lugar para la historia del excursionismo en la sierra (casa de colonias de Sant Josep Obrer). Pasamos por delante mismo de la casa, por la senda que continúa cortando la falda y bajando suavemente entre pinos. Por un talud bajamos a la pista que habíamos dejado antes, aunque sólo para cruzarla en perpendicular y continuar bajando, ahora hacia el norte, buscando el fondo del barranco de Sant Antoni. Lo seguimos aguas abajo, entre pinos y adelfas por una deleitosa senda.

Salimos de nuevo del pueblo de Serra (330 m), ahora por la carretera de Torres-Torres. Al cabo de cinco minutos la dejamos (habiendo pasado un camino a la izquierda rotulado "Carrer d´Antonio Ros") por un camino a la derecha, cementado y señalizado con el PRV8, que baja y, cruzando el barranco de Serra, se transforma de tierra y muy erosionado. Enseguida dejaremos una senda a la izquierda (por donde continúa el PR) que lleva a la font de l´Ombria, pasando al lado de la torre de Ría. Vale la pena desviarnos un poco por esta senda para ver la torre (5 minutos), testimonio del poblado árabe del mismo nombre y atalaya del valle. Continuamos, pues, por la derecha por el camino, que, enseguida, es cortado en perpendicular por una pista. La cuzamos y seguimos por la senda que va hacia el este y sureste, subiendo suavemente entre bancales de oliveras y garroferas primero, después por el bosque, hacia la sombra del castillo, que se recorta nítidamente.

Cumbre del castillo (475 m), al cual hemos llegado si darnos cuenta. Hasta aquí hemos llega una pista excesivamente ampliada para poder aparcar coches. Una senda sube por la rocas hasta el encumbrado castillo.

Castillo de Serra (536 m), del cual quedan en pie una graciosa torre y algunos restos de murallas. Su situación es privilegiada, guarda perfecta del paso d´Alcalà, por donde pasa la carretera. Como atalaya se descubre buena parte de la Sierra, con el golfo de Valencia y la verde Huerta al sureste y sur. Volviendo de nuevo a la cumbre, seguiremos la pista al notre, en un cómodo paseo.

Llegaremos a la font de l´Ombria (410 m), donde se junta el GR10 desde la font de Sant Antoni (ya conocida del itinerario anterior) y el PRV8, por los cuales seguiremos a partir de ahora. Retrocedemos unos cuantos metros desde la fuente y cogemos la senda al este que sube entre el bosque. En el mismo lugar, pero hacia la mano contraria, un camino baja hacia Serra, el mismo que hemos dejado para subir al castillo (PRV8). La senda atraviesa un bosquecillo, testimonio de la vegetación de la sierra; siempre con el barranco de l´Ombria a la izquierda. El camino finaliza al coll de Barraix, por donde pasa la carretera hacia el Garbí y de donde se deriva otra, que cogeremos, llana, y que después nos dejará a la plaza de la fuente de Barraix.

La font de Barraix (540 m) es un lugar popular de aiguada, costumbre muy arraigada en los pueblos del llano. En los alrededores de la fuente quedan algunas casas de veraneo de la época en que era preciso llegar en carro o a lomos de un macho. El lugar, situado en la vertiente norte de la serra, domina el valle del Palancia, donde nos dirigimos. Aquí abandonamos el GR10, que sigue hacia el Garbí y el pueblo de Segart, y nosotros seguimos de ahora en adelante las marcas del PRV8. Avanzamos por una pista al NE que baja suavemente por las vertientes del barranco de la Carrasca. Vamos atravesando las faldas del Garbí, en lenta recuperación de un feroz (como lo han sido todos) incendio. La dejamos justo en una revuelta que hace la pista para perder altura, donde tenemos a la derecha un colladito (350 m) que domina el caserio y el castillo de Beselga. Del colladito cogemos la senda vertiginosa, restos del antiguo y bien trazado camino, que nos lleva al fondo del barranco. Al llegar, encontramos unas casitas desde donde se canaliza el agua. Seguimos el camino acompañados por el sonido del agua hasta que, pronto, llegamos a las primeras casas de Beselga y al collado al sur de la base del castillo, donde llega la carretera.

La iglesia y el caserio de Beselga (225 m) se encuentran a los pies de una cumbre, a la cima del cual domina severamente lo que parece un supercastillo. Una vez allí no podemos dejar de subir. La senda nos deja en pocos minutos a la estrecha puerta por la que entramos al recinto, curiosamente por la parte de atrás y no por la puerta, magnífica, que da al pueblo y que no es accesible. Del castillo (260 m), no queda más que el que se ve precisamente desde Beselga, aunque la torre, eso sí, está en pie y (caso insólito en los castillos valencianos) de los pocos que permiten llegar a su plataforma superior por las escaleras internas, con muchas precauciones por su precariedad.

Volviendo al collado y a la carretera, nada más nos toca seguirla hacia abajo, entre secano primero y naranjos después, hasta Estivella. Como curiosidad podemos nombrar que, al cabo de pocos minutos de salir de Beselga y desde un oratorio a "la Madre de Dios de los Desamparados", sube una senda que lleva a la misma cima del Garbí, coronado desde el siglo XVIII y hasta la guerra por una gran cruz de madera (la cruz del Garbí) y una ermita que se mantuvo hasta hace unos treinta años (hoy en día restaurada). Esta senda es muy dificil de seguir, está prácticamente perdida, pero es el primer tramo del antiguo camino de Estivella a Náquera y una bonita manera de ver esta montaña tan interesante desde la vertiente del Palancia.

Comenzamos en la font de Barraix (540 m), lugar donde ya pasamos en el itinerario anterior. Cogemos el GR10, que dejamos aquella vez, subimos por una senda hacia una ermita, y pasamos por detrás, iendo a la carretera. Seguimos esta carretera hacia el este y subimos un collado que da paso al llano del Garbí, con el Losar del Garbí y el Puntal de la Vella al este y suroeste, respectivamente. Desde el llano del Garbí, el GR10 se abre en dos posibilidades diferentes para llegar a Segart: la más sencilla cuza el llano en perpendicular para subir después al collado que hay al este del Puntal de la Vella. Hemos escogido la otra posibilidad, que baja más al este y es muy espectacular. Cuando la carretera se acaba, después de recorrer el llano, seguimos por la senda que llega al Losar y al precipicio. Unos cuantos metros más y estaremos en la cumbre del Garbí.

El Losar del Garbí (593 m) es un impresionante balcón encima de más de 600 metros y cerca de la montaña del Garbí (601 m). La estructura de esta cumbre, formada por estratos de bloques de yesos rojos (los populares ródenos) que parecen amontonados, es muy espectacular, con rocas en equilibrio. Cerca está, rehabilitada, la ermita. Volvemos atrás, y bajamos al llano para buscar la única salida de aguas. Nos acercamos buscándola, cuando llegamos comenzamos a bajar por lo que nos parece todavía un poco imposible. Poco nos costará darnos cuenta que la peculiar estructura de la montaña es la que hace que sea un juego bajar por el lugar, inmensa escalera para la que nada más será necesario saltar o cogernos con las manos a los lugares má verticales. Además, unas cadenas en los lugares más complicados, para los excursionistas sin experiencia y colocadas por el equipo realizador del GR10, nos permitirán disfrutar del lugar, con una vegetación milagrosamente consevada en este rincón. Ya en la base, damos una mirada por encima para despedirnos del Garbí. Curiosamente, aquí encontramos un amplio camino que suponemos que debía servir antiguamente para llevar a lomos de los machos las cargas de leña que se bajaban canal abajo. Es precisamente por los restos de este camino, borrado, cerrado por el matojar, por donde bajamos la vertiente al SE. Atrás dejamos el acaparador macizo del Garbí.

LLegamos a la carretera (230 m) que nos acerca a Segart; la seguimos a la derecha subiendo.

Estamos en la plaza de Segart (230 m) bonito pueblo en el medio de una hoya cerrada por las altas montañas (el Garbí, el Puntal de la Vella, l´Alt del Pi, la mola de Segart...). Aquí llega también la otra variante del GR10. Salimos del pueblo por la calle que sigue al SW. Se continúa un camino que, inmediatamente, deja a la derecha el caminito a la fuente de Sant Josep y baja al barranco (250 m). Al llegar, cogemos una pista a la derecha (sur) que sube hacia una sombría, entre bancales de garroferas. Al cabo de poco veremos, en la falda, unos plataneros de sombra que marcan la font del Campaner, donde llegaremos pronto. Sobre la fuente y su nombre hay una leyenda que habla de la calidad curativa de sus aguas y como curó al campanero del convento de Sant Esperit. De la fuente seguimos una senda por el lado opuesto al que hemos entrado que, con unas revueltas entre bancales primero y después entre pinos, nos deja en un collado no suficiente marcado y recorrido por una pista.

Coll del Campaner (410 m) desde donde veremos un bonito panorama de donde venimos. Aquí dejamos el GR10 y nos desviaremos por la pista a la derecha (S-SW) para subir a la mola de Segart. En seguida encontraremos una desviación de la pista a la izquierda, que cogemos, para pasar a las vertientes SE de la Mola. Cuando estamos en la vertical dejamos la pista (que va de llano) y comenzamos a remontar la vertiente, sin camino definido, buscando el canal que corta en dos la corona de la Mola. Este canal, denominado humorísticamente "la Caries", es la que permite llegar (con fácil subida) a la cumbre.

La cima de la mola de Segart (566 m) (en realidad son dos, separados por el corte de la Caries) tiene una gran mesa de orientación, instalada por el Centro Excursionista de Valencia con motivo de su 25 aniversario en el año 1971, que nos ayudará a identificar el extenso panorama que dominamos, complentario y rival del del Garbí. Saboreado el horizonte hemos de bajar, por el mismo lugar por donde hemos venido.

Estamos de nuevo en el coll del Campaner (410 m) y volvemos a coger la señzlización y el trazado del GR10, que nos lleva, siguiendo una pista al SE, hacia las puntas gemelas del pic de l´Àguila. Al llegar al collado que las une, dejamos la pista a la izquierda por una senda que la cruza. Desde el Collado (430 m) ya vemos las construcciones del convento de Sant Esperit. Bajamos la vertiente por una senda muy rápida que, de primero, se acerca al lomo SE del pico y, después (en un collado al lado), gira para bajar al centro de la vertiente. Al pie de la falda encontramos una pista secundaria que, en pocos metros, llega a la pista que viene del coll de la Calderona. La seguimos a la izquierda y llegaremos a las puertas del convento.