Investigadores de la Universitat Politècnica de València han diseñado un nuevo motor de combustión interna que no genera gases nocivos para la salud ni dióxido de carbono (CO2). Se trata de un motor “revolucionario”, aseguran sus creadores, que cumple con la normativa sobre emisiones prevista para 2040 y destaca además por su alta eficiencia. Los dos primeros prototipos de este motor verán la luz en los próximos meses, gracias a la financiación de la Agencia Valenciana de la Innovación.