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Gabriel Songel, catedrático de diseño de la Universitat Politècnica de València (UPV), ha hallado el patrón de diseño con el que se compuso la reliquia del Santo Cáliz que se guarda en la Catedral de Valencia desde el siglo XV.

Para ello, Songel -con la colaboración del Cabildo Metropolitano de Valencia- ha estudiado durante su investigación las marcas de cantero realizadas en la ciudad de Valencia, llevando a cabo un pormenorizado estudio de catalogación y análisis de los antecedentes del diseño de marcas.

Songel, experto en la gestión del diseño de marcas y nuevos productos, ha trabajado a lo largo de su trayectoria profesional en el análisis prospectivo y de tendencias del diseño, así como en el estudio retrospectivo de los antecedentes de las marcas en archivos históricos y documentales.

El orfebre conocía y utilizó los cánones de diseño

En 1960, Antonio Beltrán, catedrático de arqueología de la Universidad de Zaragoza, dedujo que el conjunto del cáliz fue montado entre los siglos XII y XIII. En este sentido, Songel explica que "los análisis compositivos realizados partiendo de los patrones utilizados en la Edad Media para las marcas de cantero vienen a demostrar que el orfebre que realizó aquella reliquia conocía los cánones de diseño y los utilizó para su composición. Esta hipótesis se confirma aún más al comprobar que la inscripción que se halla en la base del cáliz fue realizada siguiendo otro de los patrones de diseño de marcas de cantero medievales".

La relevancia de la investigación reside en la anticipación medieval de vincular el dibujo en tres áreas: el diseño de objetos, el diseño de marcas y la caligrafía. Por otra parte, esta investigación es la primera que revela el criterio compositivo de esta reliquia.

Uno de los cuatro patrones de Rziha

El patrón utilizado en la composición del Santo Cáliz y en la inscripción realizada en su base es uno de los cuatro identificados por Franz Rziha en el siglo XIX a partir de en un estudio comparativo de 9000 marcas de cantero realizadas en el centro de Europa, entre los siglos XII y XIII, siguiendo los patrones de los constructores de las catedrales góticas.

Rziha clasificó estas marcas con arreglo a cuatro tipos de patrones compositivos basados en el cuadrado, el triángulo y círculos organizados entorno al cuadrado y al triángulo

El significado de la inscripción cúfica

En cuanto a la inscripción, Songel señala que ha sido interpretada "desde el profesor Beltrán hasta la actualidad como árabe en escritura cúfica y vendría a significar 'para el que reluce'. Posteriormente, en los años 70, Oñate, consultando la École Biblique de Jerusalén, pensó que podría ser hebreo pero, al no conocer su significado, se mantuvo la versión árabe".

A este respecto, el catedrático de la UPV afirma que el hecho que la inscripción esté hecha siguiendo uno de los patrones medievales y se lea en vertical invita a pensar en su lectura como una imagen especular, dado el conocimiento de los patrones de diseño y el dominio de las simetrías por el artesano.

En la versión de la imagen se pueden entreleer la WH, que aparece en una de las formas utilizadas en hebreo para escribir la palabra "dios" JHWH. Esta particularidad del hebreo de no incluir vocales y escribir de derecha a izquierda compartida con el árabe, añadida a la prohibición de mencionar el nombre de dios en hebreo, nos remite a los 72 nombres que el Antiguo Testamento utiliza para designarlo. Entre ellos, el de Yoshua Yahweh es el que tiene una arquitectura compositiva más parecida a la inscripción.

Según Songel, por lo tanto, se podría entender que el autor "superpuso el inicio de las dos palabras por su coincidencia gráfica, reforzando el significado que quería darle a la inscripción: Jesús es Dios".

Otras conclusiones

Del estudio del profesor Songel se derivan, a su vez, otras "interesantes conclusiones", entre las que destaca la constatación de que las marcas de cantero son la prehistoria del diseño de marcas o la existencia de patrones geométricos complejos de diseño en los siglos XII y XIII.

Así mismo, Songel destaca la "universalidad" de las marcas de cantero, presentes por toda la geografía española y europea. "Además, estas marcas demuestran las influencias artísticas y de transferencia de conocimiento y tecnología de la construcción durante el Medioevo", apunta el investigador de la UPV.

Para llevar a cabo su estudio, el profesor Songel recopiló información del Archivo de la Catedral de Valencia, así como del departamento de inscripciones del Museo de Israel en Jerusalén, revisando la bibliografía más especializada en arte medieval

Noticia UPV TV
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