Investigadores de la Universitat Politècnica de València, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas y la Universitat de València han dado un paso más hacia la llamada "indetectabilidad acústica". Se trata de un nuevo prototipo de manto acústico en dos dimensiones capaz de conseguir que las ondas de sonido con una frecuencia específica, al llegar a un objeto, lo sorteen como si dicho objeto no estuviera, gracias a un efecto cooperativo de las unidades con las que está construido el manto. El trabajo fue publicado por la revista Applied Physics Letters el pasado mes de agosto y ha sido incluido en la sección News Highlights del American Institute of Physics (AIP).
Detrás del nuevo prototipo se encuentra el Grupo de Fenómenos Ondulatorios (GFO) de la UPV y la Unidad de Materiales y Dispositivos Optoelectrónicos (UMDO) del Instituto de Ciencia de Materiales de la UV, asociada al CSIC-IMM.
El manto acústico desarrollado por los investigadores consta de 120 cilindros de aluminio de 15 milímetros de diámetro, que rodean un objeto (otro cilindro) de 22,5 centímetros. La posición de cada cilindro en el manto se ha obtenido utilizando técnicas de optimización basadas en algoritmos genéticos (estos algoritmos numéricos imitan la evolución darwiniana).
Los investigadores han demostrado que las ondas de sonido de una frecuencia específica (3.061 Hertz, con una ancho de banda de 100 Hertz) mantienen su patrón original, tanto al pasar alrededor del objeto como más allá del mismo.
Sobre su aplicación práctica, en un futuro, podría aplicarse para mejorar la acústica del entorno urbano, la insonorización de las salas de espectáculos o para crear cascos que protejan mejor los oídos de los ruidos extremos.
Noticias destacadas