La Universitat Politècnica de València (UPV) es una de las universidades más transparentes de España. En concreto, se sitúa en el quinto puesto, empatada con A Coruña, Rey Juan Carlos y Vigo, según el informe titulado Examen de transparencia que publica la Fundación Compromiso y Transparencia.
En este aspecto, cabe destacar, además, que la UPV es la universidad que presenta una mayor mejora con respecto al curso anterior. No en vano, sube su ratio un 28% y se posiciona como entidad transparente, categoría compuesta por aquellas instituciones que consiguen cumplir, al menos, 40 de los 54 indicadores contemplados en este examen, de los que necesariamente dos deben ser los relativos a información económica: estados financieros e informe de auditoría.
Con un total de 43 indicadores aprobados, que representan el 80% de los objetivos cumplidos, la UPV se sitúa en el top 10 del total de 75 entidades evaluadas: 49 universidades públicas y 26 privadas. La institución que dirige Francisco Mora es, además, la primera de las valencianas y de las politécnicas españolas.
La UPV destaca en la labor de rendir cuentas en lo que concierne a la información económica, no sólo de la organización, sino también de sus entidades dependientes. Igualmente, alcanza una transparencia del 100% en las categorías de plan estratégico, personal (PAS, PDI y bandas salariales), políticas y gobierno (órganos de gobierno, reuniones y estatutos), alumnos (canales y ayudas) y resultados (investigación, rendimiento académico, satisfacción, rankings, internacionalidad e inserción laboral).
El ranking define transparencia voluntaria como el esfuerzo por publicar y difundir la información relevante de la organización, haciéndola visible y accesible a todos los grupos de interés de manera completa y actualizada.
Los resultados de este nuevo informe muestran un descenso significativo en este último curso en los grados de transparencia y las prácticas de buen gobierno de las universidades públicas. De hecho, únicamente el 31% son transparentes. Hay un segundo grupo, que incluye al 51% del total, que son translúcidas y, finalmente, un 18% resultan opacas.
En el grupo de las 26 privadas, el escenario es peor. Solo el 11,6% alcanza el nivel de transparencia. A este respecto, el informe destaca que "el estancamiento del nivel de transparencia que se vive en las universidades privadas tras siete ediciones del informe choca con la evolución que han tenido los centros públicos".
En opinión de Javier Martín Cavanna, director del estudio, "las universidades están sometidas a constantes escrutinios por parte de la sociedad. Probablemente ninguna institución sea tan evaluada, medida y examinada como la universidad".
En cuanto a los resultados de este análisis, Martín Cavanna señala que "la universidad pública española, no así la privada, ha mejorado mucho en los últimos años. Por supuesto, las universidades pueden y deben seguir mejorando en sus compromisos con la transparencia, pero los estándares alcanzados se encuentran por encima de la mayoría de los países de nuestro entorno".
Por ese motivo, el máximo responsable del estudio se plantea incluir, en la próxima edición del mismo, una comparativa internacional. En ella, adelanta que España se posicionaría en un nivel "alto", porque en los países anglosajones "no hacen webs transparentes si nadie se lo pide".
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