El objetivo era mostrar a los estudiantes el tejido productivo donde una gran parte de ellos van a insertarse profesionalmente.
A lo largo de los meses de octubre y noviembre la Càtedra d’Economía Valenciana organizó su primer Seminari de l’Empresa Valenciana. Su objetivo es difundir y visibilizar la realidad y singularidades de la empresa valenciana, abordando la cuestión siempre desde distintas perspectivas. La justificación es sencilla: las empresas valencianas son el tejido productivo donde se van a insertar profesionalmente la mayoría de nuestros egresados. Parece pues recomendable incidir en los diagnósticos y retos de futuros que tienen nuestras empresas.
Francisco Vallejo, CEO de Pinturas Isaval y Presidente del Instituto Valenciano de la Empresa familiar (IVEFA), intervino en el seminario para hablar de una de nuestros rasgos característicos: la empresa familiar. A través de la identificación de las trampas en que se cae cuando se habla de empresa familiar y de la formulación de sus retos de futuro, Vallejo diagnóstico la actualidad de este tipo de empresas y realizó propuestas de mejora para una mayor profesionalización y un mejor gobierno de estas sociedades.
Desde una perspectiva técnica pero también política, Juan Pérez Ballester, técnico del Instituto Valenciano de investigaciones Económicas (IVIE) y actual Director General de Modelo Económico, Financiación Autonómica y Política Financiera de la Generalitat, explicó a los asistentes las claves para entender el sistema de financiación autonómica. La injusta financiación que sufren nuestros servicios públicos afecta gravemente –entre otras- a las inversiones y a las políticas de apoyo empresarial, tan relevantes en un contexto de empresas pequeñas con problemas para innovar e internacionalizarse.
Por último, desde una óptica ligada a las infraestructuras y a la logística, Carlos González Triviño, Director de Sistemas y Aplicaciones de Gobernanza Industrial SL, desarrolló una sesión donde identificó las oportunidades empresariales relacionadas con el desarrollo del corredor mediterráneo. El actual estado de infradesarrollo del corredor no solo supone mayores costes logísticos para nuestras empresas y un mayor impacto ambiental, sino que genera una barrera al aprovechamiento de oportunidades que están surgiendo en los mercados internacionales.