Valeria Orsillo Di Gennaro, delegada de estudiantes

Valeria Orsillo Di Gennaro es la delegada de estudiantes del Campus de Gandia. Cursa el Grado en Comunicación Audiovisual. Está en tercero y, como ella afirma, “tengo la suerte de que mi carrera es bastante más práctica que teórica, por lo que puedo dedicar mi cabeza no tanto a memorizar, sino a meterme un poco más de lleno en las labores de delegada”. 

Tras desempeñar el cargo de vicedelegada, Valeria asumió la dirección de la Delegación de Alumnos de la Escuela Politècnica Superior de Gandia (DAEPSG) el pasado mes de septiembre. “Realmente estoy encargando de la segunda mitad del año, hasta las próximas elecciones que tendrán lugar en noviembre”. Hasta ese momento, quiere “priorizar la difusión de la DAEPSG y darle fuerza a la voz del estudiante en las decisiones que afectarán a los estudiantes actuales y a los que vendrán en un futuro”. 

Un gran equipo de personas

Desde la Delegación que encabeza, cuenta con el apoyo de todo su equipo. “Algo muy bueno es que puedo contar con más personas para las cosas que yo no pueda abarcar y, como hay muchos grados distintos en la delegación, podemos trabajar alrededor de nuestras responsabilidades académicas sin que desaparezcamos todos durante la época de exámenes”.

La DAEPSG “está formada por los coordinadores de las diversas áreas que se encargan de las actividades más enfocadas al centro: Mariangela Napoliello, coordinadora del área de Equidad; Marta Hidalgo, coordinadora de asuntos académicos; Esther Saiz, que también coordina el área de vida universitaria; Iker Orts, coordinador de deportes y Jonathan Hernández, coordinador del área de Erasmus. Dentro de estas áreas tenemos a todos los colaboradores y, tras la Feria de Servicios, esperamos incluso duplicar la cantidad de personas que participamos en la representación”. 

Informar, colaborar y ayudar al alumnado 

Compromiso, sacrificio, dedicación, generosidad… es lo que conlleva ser representante de los estudiantes, pero a la vez satisfacción por poder ayudar, por escuchar y trasladar los problemas al órgano correspondiente y tratar de encontrar una solución. Según Valeria, “con el confinamiento, la labor de la Delegación desapareció bastante de cara a los estudiantes, no se podían organizar actividades que nos visibilizara y tampoco se usaba nuestro espacio por medidas de sanidad. Ahora que hemos vuelto prácticamente a la normalidad, lo que más me interesa es que vuelva a haber más trato entre los grados y la delegación, y que sepan que pueden contar con nosotros para ayudar y dar voz a sus problemas e ideas”. 

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